Es casi imposible vivir en occidente sin haber oído la acusación de que “los judíos controlan los medios de comunicación.” ¿Sí los controlan?

Ya debería usted sospechar que no. Después de todo, hemos visto (Parte 2) como los medios de comunicación masiva adoran a mentirosos que, negando la historia, presentan a los judíos israelíes de forma negativa, y a sus enemigos genocidas de forma positiva (Parte 5). Los mismos medios occidentales no nos informan que estos mentirosos solían entrenar terroristas (Parte 4). Así que el suponer que ‘los judíos’ controlan a los medios de comunicación requiere defender el absurdo de que ‘los judíos’ tienen tantas ansias por cometer el suicidio colectivo que se esmeran por encubrir a los mentirosos que los atacan y que fácilmente podrían ser expuestos, convirtiéndolos en favoritos de la infraestructura mediática que controlan.

Es mejor evitar absurdos semejantes. Pero en este caso es todavía mejor refutarlos, una y otra vez.

¿Donde empezar?

Echémosle primero un ojo a General Electric, una de las mas grandes compañías mediáticas.

General Electric
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Esta es una compañía cuyas acciones se venden en la bolsa, y por lo tanto los dueños son los accionistas, no ‘los judíos.’ Pero de todas formas a las compañías las dirigen sus Chief Executive Officers (CEOs). El CEO de General Electric por mucho tiempo fue Jack Welch, quien, como me informa el New York Times, es “el nieto de inmigrantes irlandeses… Su madre, Grace, [era] una católica romana estricta…”[1] Y esta orientación religiosa parece haber perdurado porque el Toronto Star dice que “Welch [es] un católico devoto.”[2] O sea que Welch no es judío.

El actual CEO de General Electric es Jeffrey Immelt, cuyo nombre es alemán. USA Today nos dice que Immelt es “presbiteriano” (secta cristiana protestante).[3] O sea que Jeffrey Immelt no es judío.

Con esto demostramos que a muchísimos medios de comunicación masiva los controlan, y los han controlado, los no judíos.

General Electric es dueña de NBC/Universal Television Studio, y de NBC/Universal Television y Universal Pictures, teniendo además el 30% de Paxson Communications.

También es dueña de las siguientes emisoras de NBC: WNBC (New York), KNBC (Los Angeles), WMAQ (Chicago), WCAU (Philadelphia), KNTV (San Jose/San Francisco), KXAS (Dallas/Fort Worth), WRC (Washington), WTVJ (Miami), KNSD (San Diego), WVIT (Hartford), WNCN (Raleigh), WCMH (Columbus), WVTM (Birmingham), WJAR (Providence).

Por si fuera poco, GE es dueña de lo siguiente: Telemundo Stations: KVEA/KWHY (Los Angeles), WNJU (New York), WSCV (Miami), KTMD (Houston), WSNS (Chicago), KXTX (Dallas/Fort Worth), KVDA (San Antonio), KSTS (San Jose/San Francisco), KDRX (Phoenix), KNSO (Fresno), KMAS (Denver), WNEU (Boston/Merrimack), KHRR (Tucson), and WKAQ (Puerto Rico).

Finalmente, a GE le pertenecen los siguientes canales: CNBC, MSNBC, Bravo, Mun2TV, Sci-Fi, Trio, y USA.[4]

Estos ya son muchísimos medios de comunicación masiva. Y aún así, comparado con Time-Warner, General Electric no es un imperio mediático tan grande.

Time-Warner
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A esta compañía antes se le llamada AOL-Time-Warner cuando a AOL todavía se le admiraba. En enero de 2003 el Washington Post reportó lo siguiente:

“El anuncio este domingo de que Steve Case renunciará la presidencia de la compañía en mayo deja a [Richard D.] Parsons solo en la cima de la compañía mediática mas grande del mundo [Time-Warner].”[10]

La noticia de la muerte de la madre de Parsons, en el New York Times, dice que “el servicio funerario será realizado el viernes 19 de enero a las 10 am en la iglesia luterana de New Hope.”[11] O sea que Parsons no es judío. Así que “la compañía mediática mas grande del mundo” es dirigida por un no judío.

Steve Case, el hombre que dirigió AOL-Time-Warner previo a que Parsons heredara el puesto, celebró misa en la Catedral de Grace de San Francisco cuando murió su hermano Dan.[12] O sea que Steve Case no es judío.

Ciertamente que el CEO de Time-Warner en el periodo 1992 a 2002 fue Gerald Levin, y el sí es judío. Pero eso ya pasó. Y cabe apuntar que durante ese tiempo Time-Warner no producía interpretaciones pro-judías. Al contrario. Basta con señalar que CNN fue adquirida por Time-Warner en 1996, durante la presidencia de Levin, y CNN es el órgano de noticias televisivas principal de Time-Warner. Vincent Cannistraro aparecía constantemente en CNN cuando Levin la adquirió (por ejemplo, ¡mas de una vez por mes en el año 1994!).[13] Pero cuando CNN pasó a ser parte de Time-Warner, CNN no expuso a Cannistraro como terrorista -- al contrario, continuó apareciendo en CNN como ‘experto’ antiterrorista fiable. Y en el 2001, con Gerald Levin presidiendo todavía como CEO, Wolf Blitzer de CNN, para sustentar su propio ataque anti-israelí, se refirió al editorial de Vincent Cannistraro en el Washington Post (que defiende los derechos humanos de los asesinos que dan muerte a niños inocentes israelíes).[14]

Rupert Murdoch
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Pasando a lo siguiente, he oído muchas veces a la gente decir que Rupert Murdoch es judío, pero esto es porque “A la madre de Murdoch con frecuencia se le describe, erróneamente, como judía -- aunque no lo sea,” dice Wikipedia. Ahora, si la madre de Murdoch no es judía, me pregunto ¿porqué “con frecuencia se le describe, erróneamente, como judía”? ¿Acaso tendrá esto algo que ver con el hecho de que Rupert Murdoch presida “una de las compañías mediáticas mas grandes e influyentes del mundo”? En todo caso, como me informa también Wikipedia, “El padre de Rupert era hijo de un ministro presbiteriano de Escocia.”[15] O sea que Rupert Murdoch no es judío.

Como en el caso de la madre de Murdoch, al imperio mediático de Rupert también con frecuencia se le describe, erróneamente, como pro-judío. Para demostrar que esto es falso, basta con mencionar que FOX TV es parte de este imperio. Esta compañía televisiva ha entrevistado a Vincent Cannistraro, vistiéndolo de experto ‘antiterrorista,’[16] y lo ha utilizado como fuente supuestamente fiable en ocasiones múltiples.[17] También ha entrevistado a Raymond McGovern como representante de Veteranos Profesionales de la Inteligencia por la Cordura (VIPS).[18]

¿Tiene FOX TV un sesgo pro-Israel, como se alega? Yo sí que tengo un sesgo pro-Israel, por lo cual me he esmerado en documentar si puede uno creerle a Vincent Cannistraro y a Raymond McGovern, quienes desde su lugar destacado en los medios a viva voz atacan a Israel. ¿Por qué no hace lo mismo FOX TV? Es increíblemente fácil de hacer. Si FOX TV realmente compite con los otros medios, y si tiene FOX TV un sesgo pro-Israel, ¿por qué no le demuestran a sus televidentes que no puede uno fiarse de lo que dicen Vincent Cannistraro y Raymond McGovern, enemigos férreos de Israel? Esto simultáneamente avanzaría los intereses supuestamente pro-israelíes de FOX TV y demostraría de paso la inferioridad de la competencia mediática, la cual ha promocionado incesantemente a Cannistraro y a McGovern como ‘expertos’ fiables (véalo aquí, y aquí). Pues no: FOX TV se esmera por sacarle brillo a la reputación de Cannistraro y de McGovern, al igual que el resto de los medios.

¿Quién controla los medios?
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Muchos judíos están empleados en los medios, y quizá estén sobre-representados . Hay muchos judíos en todas las profesiones liberales, porque siempre han sido la cultura letrada por excelencia, y siempre que se les da oportunidad hacen lo mejor para obtener educación de calidad. Pero, claro, ‘los judíos’ no controlan los medios.

Examinemos ahora la hipótesis opuesta a la que subyace al enunciado de que los medios están controlados por ‘los judíos.’ Esta sería la hipótesis de que los antisemitas están en el poder en todos lados. ¿Es una hipótesis razonable? Pues, ¿qué predicciones hace? Puedo pensar en dos a bote pronto.

Prediccion 1. A un medio que defienda a los judíos no se le permitirá properar.

Evidence: Israel National Radio ha sido perseguido por la ofensa de defender a Israel. Si le interesa leer sobre esto, consulte:

"On the importance of Israel National Radio (Arutz Sheva)"; Historical and Investigative Research; 30 June 2006; by Francisco Gil-White
http://www.hirhome.com/israel/inr_interview.htm

Corollary. A media company owned or controlled by Jews that does prosper will have to be an ‘exception that proves the rule.’ It will be an exception in that the company really will be owned or controlled by ethnic Jews (most big media companies aren’t), but it will prove the rule by attacking the Jews as loudly -- or perhaps more loudly -- than the rest of the big media. Why? Because otherwise the antisemites in power will not allow such a media company to prosper, as per the first prediction, above.

Evidence: Let us take a look at the performance of the The New York Times and The Washington Post during the Holocaust, because both are big media companies that have been Jewish-owned, and because the Holocaust simply had to be opposed -- it was not a morally ambiguous issue. The following is from Kenneth Levin's The Oslo Syndrome:

“The failure of most media outlets to give prominent coverage to news related to the Nazis' campaign of extermination compromised efforts to increase public awareness and rally support for rescue, and prominent Jewish-owned news outlets shared in this failure. The New York Times, in the years before the war, had already established a pattern of limiting discussion of the Nazis' depredations of the Jews. When, shortly after Hitler's ascension to power, the paper was challenged to open its letter columns to the plight of Germany's Jews, publisher Adolph Ochs refused. He explained that to do so would generate too much mail and would require, under Times rules, that he give equal space to the other side. (Almost two decades earlier, in 1915, Ochs had warned an editor against giving too prominent coverage to an American Jewish Committee campaign for aid to Jewish civilian populations that were enduring particular hardship in eastern European war zones. The publisher suggested that the campaign was too parochial.) When news of the mass killing began to emerge, the Times consistently buried the story. The revelation by Rabbi Wise in November, 1942, of two million Jews murdered was reported on page 10, next to an article about a truck hijacking in New Jersey.

People who have worked for and written about the Times have spoken of management's not wanting the Times to appear to be concerned with Jewish issues or to be thought of as a Jewish paper. But this explanation for the paper's subdued coverage of the plight of Europe's Jews is not simply a retrospective one; the nature of the Times' coverage, and the explanation for it, were perceived similarly by many people then. For example, Deborah Lipstadt writes that a resolution by 500 Christian ministers and laymen donouncing the 'systematic Nazi destruction of the Jewish people' was given only a few lines by the Times and buried in page 7, and a similar event was reported on page 17. Villard blamed the paper's 'unfortunate trait' of not wanting to appear 'a vigorous defender' of the Jews.

...The Washington Post, also a Jewish-owned paper in a position to influence the level of public awareness and attention, likewise gave little prominence to coverage of the genocide. Moreover, publisher Eugene Myers strongly objected to calls for rescue. The paper ran a four-part front page series -- much higher profile than it gave any Holocaust story -- attacking the Bergson group [which was pushing for a rescue effort]; a series that it subsequently had to retract because of inaccuracies. In addition, Meyer wrote a letter to the U.S. solicitor general accusing those promoting rescue of harassing the president, and concluded that he felt it is not 'necessary for any pressure group, however well meaning, to devote its time and money to the business of 'molding American opinion' on this subject.”[9]

The above suggests that ‘the Jews’ do not even control the media that is owned by individual Jews. This is consistent with the Jews being an oppressed people, which is of course the opposite of a conspiracy holding the reins of world power (and it fits the pattern, doesn’t it, of the last 2000 years, in which there has been one anti-Jewish massacre after another, with relentless regularity, and often mobilized by the accusation that the Jews are supposed to be a secret conspiracy in power!; see Part 1).

Prediction 2. The real powerbrokers should discriminate against Jews in the buying and selling of big media.

Evidence: Edgar Bronfman's difficulties in becoming a media mogul, which I examine below.

Edgar Bronfman Jr. y la Universal
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Como decíamos, estos días GE es dueña de Universal. Vale la pena resumir la forma como acabó apoderándose GE de esta compañía porque Edgar Bronfman Jr., que sí es judío, quería controlar esta compañía pero no pudo. He ahí una lección importante.

El Los Angeles Times explica que “Edgar Bronfman Jr. quería convertirse en potentado de los medios de comunicación,” y tenía tantas ganas que “arregló la venta de la compañía familiar [Seagram]…para financiar su sueño de un imperio mediático global centrado en Universal Studios…”[5] Para que vea usted lo que estaba dispuesto a arriesgar Bronfman con tal de convertirse en magnate de los medios, basta con esclarecer que “la cara apuesta Hollywoodiense le costó a los Bronfman Universal, su empresa de licores, y una buena porción de su fortuna multimillonaria.”

Pero a pesar de la pasión inigualada de Bronfman por convertirse en magnate de los medios, no pudo. Después de comprarle Universal a gentiles (Matsushita, una compañía Japonesa), se la tuvo que vender a los gentiles de Vivendi en menos de un año, soltándola como si fuera balón de rugby. Cuando la quiso readquirir, sin importar lo que ofreciera, Bronfman simplemente no pudo, como veremos.

Jean-Marie Messier presidía como CEO de Vivendi cuando esta compañía adquirió Universal de Edgar Bronfman. Este Messier había estado comprando muchísimas cosas, y se han escrito una multitud de artículos explicando los problemas de Vivendi como consecuencia del “desenfreno adquisitivo” de Messier, el cual estiró mucho los recursos de la compañía. Pero en un artículo de Slate con fecha 6 de agosto de 2003, Messier dio una explicación bien distinta de por qué Vivendi-Universal no funcionó: “Según Messier, el clan de judíos en Hollywood quería fregarse al gentil Francés.”[6] O sea que Messier no es judío.

Y Messier fue reemplazado en el 2002 por Jean-René-Fourtou, cuyo nombre parece indicar que tampoco es judío.

Ahora, el CEO de Vivendi en este momento es Jean-Bernard Lévy, cuyo nombre sí parece judío. Pero resulta que el que tiene el poder es el señor Claude Bébéar, sobre el cual el New York Times explicó en el 2003 que es considerado por muchos como “un siniestro ‘padrino’ del ‘capitalismo de los amigotes’ de la vieja escuela,” y lo describen como “un católico romano practicante.”[7] O sea que Claude Bébéar no es judío.

Bébéar tiene tanto poder que es él quien decide a quien le toca ser el CEO de Vivendi, como también lo explica el New York Times en el mismo artículo:

“En 1991, [Bébéar] invadió los Estados Unidos con mil millones de dólares invertidos en el grupo Equitable Life Insruance, un negocio que después transformó en parte de AXA. Eso le dio el peso en el mundo financiero internacional necesario para instalar al Sr. Fourtou el año pasado como presidente de Vivendi, reemplazando a Jean-Marie Messier, que fue expulsado cuando a Vivendi la aplastó la deuda que resultó de su desenfreno adquisitivo comprando varias compañías americanas grandes.”

Pasemos ahora al drama Bronfman.

El drama Bronfman
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Tres años después de venderle Universal a Vivendi, Edgar Bronfman Jr. preparó “una oferta desesperada para recuperar Universal” cuando Vivendi, aplastada por el desenfreno adquisitivo de Messier, anunció que la vendería. Otros competidores se salieron del juego cuando vieron la oferta superior de Bronfman. A pesar de todo esto, el hombre puesto al mando de Vivendi por el “católico romano practicante” Claude Bébéar, Jean-René Fourtou, de todas maneras le vendió Universal a otros (no judíos): a General Electric.

Como lo contó el Los Angeles Times:

“[Bronfman] se representó a si mismo como ‘domador de leones’ a un grupo indisciplinado de inversionistas privados, uniéndolos lo suficiente como para presentar la oferta de 13 mil millones de dólares con los cuales recuperar su imperio Universal. …para Septiembre, cuando el presidente de Vivendi Jean-René Fourtou prometió nombrar al ganador, parecía que Bronfman había ganado. Todos los potentados de Hollywood se habían salido de la apuesta por Universal. . . Sus razones eran obvias: Vivendi estaba pidiendo demasiado dinero.

Pero Bronfman. . .se andaba desquitando, y además tenía una convicción fundamental en el valor intrínseco de Universal. El estudio quizá no valiera los 14 mil millones que estaba pidiendo Vivendi, pero al modo de ver de Bronfman el precio que pedían estaba lo suficientemente cerca como para quedarse en el juego hasta el final.

Luego, la mañana del Día Internacional del Trabajo, cuando Bronfman se preparaba para festejar su triunfo como el anterior y futuro alcalde de Universal City, Fourtou anunció el acuerdo por 14 mil millones con NBC [es decir, con General Electric].”[8]

No es ambiguo lo acontecido.

Si “Bronfman…se andaba desquitando…[e iba a]…quedarse en el juego hasta el final,” era obvio que sacarle mil millones de dólares extra a Bronfman era mas fácil que sacárselos a alguien mas. Tenía una pasión desmedida por recuperar la compañía y hubiera incrementado la oferta si se lo hubieran pedido. ¡Pero no se lo pidieron! Vivendi le vendió Universal a GE a pesar de que GE no ofreció ni un centavo mas de lo que pedía Vivendi.

Esto podría considerarse como prueba de la forma en la que los gentiles ricos discriminan a los judíos ricos en la compra/venta de los medios de comunicación masiva.’ Pero ciertamente que no cuenta como evidencia de que ‘los judíos’ tengan mucha influencia en los medios de comunicación masiva.

De todas formas; si a Bronfman le hubieran permitido crear el imperio mediático de la Universal que tanto ansiaba, sus medios seguramente hubieran atacado a los judíos. Tengamos en cuenta nada más que Bronfman padre , desde su tribuna en el World Jewish Congress, a menudo se comporta como un agente anti-Israel. En los primeros años de la administración de Reagan, Edgar Bronfman, padre, le prestó su nombre a varios ataques diplomáticos contra Israel, y en 1985 lideró un intento de maniobrar a espaldas de Israel para forzarla a aceptar un estado terrorista OLP a un costado. Bronfman es ciudadano de EEUU, no de Israel, y los patriotas Israelis lo repudiaron.[9a]

Un comentario final
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Lo que sigue es por pura diversión, pero permítame señalar algo interesante.

Cuando encontramos judíos entre los grandes controladores de los medios, ellos no defienden a los judíos en absoluto. Pero tampoco encontramos tantos. Lo que vemos es que hay un gran número de grandes controladores de los medios que son cristianos: Jack Welch, católico; el ‘padrino’ super poderoso que toma las decisiones últimas en Vivendi (y en muchas otras partes), Claude Bébéar, otro católico; y Steve Case, que también es Católico. Luego tenemos a Jeffrey Immelt, presbiteriano; y a Rupert Murdoch, otro presbiteriano. Richard D. Parsons es Luterano. ¡Todos cristianos!

Es un hecho histórico que los evangelios cristianos acusan falsamente a ‘los judíos’ de haber asesinado a Dios (vea la Parte 1 de esta serie). Es un hecho histórico que los cristianos han perseguido a los judíos en el occidente desde hace dos mil años (vea la Parte 1 de esta serie). Y es un hecho documentado en este artículo que los medios de comunicación son anti-judíos(vea las Partes 2 a 5 de esta serie). Finalmente, vemos que el gobierno de EEUU conviene con los medios en sus ataques contra Israel cuando podría refutarlos fácilmente (vea la Parte 6 de esta serie). Sin embargo, el rumor que se oye no es de una conspiración cristiana para atacar al pueblo judío -- muy a pesar de que, como ya lo ve, son ‘los cristianos’ quienes controlan los medios de comunicación.

Curioso ¿no?

Me viene a la cabeza una cita de El Mago de Oz “No prestes atención al hombre que está detrás de la cortina. . .!”